Enorme gesto de amor en Lomas: prestó su vientre para ayudar a dos familias

MAMÁ DEL CORAZÓN. Stella Maris Galarza tiene 46 años y se animó a la subrogación de vientre para cumplir el sueño de quienes no podían tener hijos.

Stella Maris vecina de Lomas prestó su vientre dos veces para ayudar a otras familias

Stella Maris, vecina de Lomas, prestó su vientre dos veces para ayudar a otras familias.

Stella Maris Galarza vive en Lomas de Zamora y tuvo un enorme gesto de amor que la convirtió en una auténtica mamá del corazón. La mujer de 46 años prestó su vientre con el fin de cumplir el sueño de dos familias que no podían tener hijos y está dispuesta a volver a hacerlo.

"Primero fui donante de óvulos muchos años. Supe por una amiga que podía ayudar a otras mujeres en ayudar con óvulos para que tengan sus hijos. Luego un médico me preguntó si me animaba a prestar mi vientre para ayudar a las familias para tener a sus hijos y que lo piense", relató la vecina lomense a La Unión sobre sus primeros pasos en el tema.

"Empecé a prepararme sola psicológicamente. Fue un año que pensaba en estar embarazada y que no fuera mío. Lloraba, sufrí mucho", comentó sobre el duro proceso de imaginarse con un bebé en el vientre que luego tendría que entregar a otra familia. Finalmente, cuando el tratamiento se aprobó en Argentina, Stella Maris superó esa barrera: "Le dije al médico que ya estaba preparada. Yo quería ayudar dar amor a otra familia como yo tenía la mía".

Esa experiencia que al principio le generaba temor, terminó por cambiarle la vida. Se involucró cada vez más. "El haberlos tenido en mi panza fue hermoso. Ayudé primero a una familia que tuvo trillizos y luego de uno solo. Tengo comunicación con ellos, los veo por fotos. Son mis amigos de la vida. Saben que en lo que sea estaré para ellos siempre. Los amo mucho. Cada tratamiento lo hice con amor y me siento feliz saber que hice bien a dos familias", dijo emocionada.

Si bien Stella Maris reconoce que el afecto hacia sus "hijos del corazón" es diferente al de sus hijos biológicos, ella los trató a todos por igual y encaró el proceso con mucho compromiso: "El amor no es como el de mis hijos, pero das amor también. Hablé con ellos en mi vientre, contándoles que sus papás están esperándolos con amor. Después de que nacieron, a los trillizos no los pude ver porque eran chicos y estaban en neonatología, pero en el último embarazo sí lo tuve en mis brazos y lo llené de besos hasta que se fue. Esos niños son mi familia también".

¿Cuál es el marco legal para prestar el vientre? Stella Maris figura como madre en el parto, pero luego en el Registro Civil se deja asentado que ella es subrogante, con abogado y escribano de por medio. En los papeles se deja constancia de algo que a muchos les cuesta entender: la vecina de Lomas no aporta ningún gen al bebé. "La gente se equivoca pensando que ese hijo es mío. No es así. Yo empiezo un tratamiento y me colocan el óvulo de otra persona, por eso no es mío. No tiene mi sangre, sólo presto mi vientre para que ese bebé crezca y darle amor hasta que vaya con sus padres", explicó.

El apoyo de su familia, compuesta por seis hijos y cinco nietos, fue fundamental para aceptar este desafío. Tras haber ayudado a dos parejas, le gustaría cumplir el sueño de alguien más y también anima a otras mujeres a seguir sus pasos.

"Mi experiencia fue, es y será hermosa siempre. Sé que lo voy hacer nuevamente sin dudar y mi familia me apoyó. Tengo 46 años y me siento capaz de hacerlo. Aliento a las que quieran ayudar con amor que ayuden a otras parejas que se les dificulta tener a sus hijos, que se pongan en ese lugar, en qué pasaría si ellos no pueden. Yo tengo mi familia y soy la persona más feliz del mundo. ¿Cómo no voy a ayudar a esas familias que desean con tanto amor ser papás?", cerró.