Antonio Sassone, ejemplo de vitalidad y buen humor

Vino desde Italia en 1949 y vivió siempre en su casa de la calle 14 de Julio, en Temperley. Junto a su familia y amigos celebró ayer 108 años.

Antonio Sassone cumplió ayer 108 años y es el vecino más antiguo de la ciudad. En 1949 llegó desde Italia para instalarse en una casa de Temperley donde vive actualmente y recibe la visita de sus familiares, quienes lo destacaron como una persona alegre y que siempre estuvo activa. A modo de homenaje, el Municipio le entregó el libro con la historia de Lomas.

Junto a su hija de 14 años, Antonio viajó desde la ciudad de Montefalco di Val Fortore (provincia de Benevento) hasta una vivienda ubicada en la calle 14 de Julio, entre Suviría e Yrigoyen, que era de su hermano.

En 1954, se reunió con toda la familia (esposa y tres hijas) menos la hija mayor que se quedó en Europa. Además de cinco hijos, también tiene 14 nietos, 12 bisnietos, tres tataranietos y un cuarto que está en camino.

“Estuvo siempre en la misma casa y ahora vive sólo hace 30 años pero recibe muchas visitas de la familia. De hecho, el domingo vamos a hacer una reunión a la tarde para festejar el cumpleaños y que sople las velitas”, contó su nuera María Cirocco, que vive al lado y siempre está atenta a cualquier requerimiento.

Su primer empleo fue en el Corralón Bertora y luego entró en la empresa SIAM donde estuvo hasta el cierre y aunque luego se jubiló, siguió trabajando junto a su hijo en una fábrica de pastas y también como jardinero en el Colegio del Huerto.

Antonio fue uno de los vecinos que participaron de la construcción de la Escuela Nº69 “República de Italia” de Temperley, que debe su nombre a la comunidad que trabajó con mucho esfuerzo para levantarla.

Mientras que dentro de su casa tuvo una quinta en la que sembraba todo tipo de verduras como radicheta, tomate, lechuga, una planta de limones, y también realizaba cucharas y tenedores de madera (de laurel) para sus nietos. “Cortaba el pasto, podaba las plantas y no dejaba que otros lo hagan porque decía que nadie sabía hacerlo como él. Siempre se levantaba temprano, hacía gimnasia y hasta los 104 años se preparaba la comida bien fresca con los alimentos de su huerta. La verdad que tuvo una vida muy sana, nunca fumó y estuvo muy activo a pesar de su jubilación”, dijo María.

“Se encuentra en un optimo estado de salud física, no depende de ningún medicamento, es bastante independiente, aunque requiere ayuda para que se realicen las tareas de la casa. Camina sin bastón, sube y baja las escaleras por sus propios medios y su gran pasatiempo fue la huerta del fondo su casa, de la cual se proveía tanto el como la familia”, agregó Fernando Sassone, uno de sus nietos.

El Intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, le regaló un libro sobre la historia de Lomas y, de esta manera, homenajeó a un vecino que es muy querido y valorado en la localidad. “Aunque hoy ya no realiza ninguna tarea, conserva su alegría y buen humor aunque es un poco gruñón. Canta todo el día canciones de su época y siempre tiene un motivo para sonreír y, según sus propias palabras, lo que lo mantiene vivo es tener a toda la familia unida, y eso le dan ganas de vivir 100 años más”, expresó Fernando, quien contó que está muy contenido por to