HERMANOS OVIEDO La familia de los hermanos que habrían sido asesinados en un incendio en Fiorito reclaman justicia. En medio del dolor, aseguran que son acosados de forma virtual.
Mientras reclama justicia, la familia de Jorge y Benjamín Oviedo, los hermanos que habrían sido asesinados en un incendio intencional en Villa Fiorito, ahora sufriría el acoso por redes sociales de los acusados.
"Hacen Facebook truchos para comentar las publicaciones que hacemos de pedido de justicia, pero nosotros sabemos que son ellos", explicó Mariana, la madre de las víctimas, en diálogo con La Unión.
"No son mensajes privados, pero sí son comentarios muy hirientes. Lo más doloroso es que los chicos ya están muertos y como madre y hermanos estamos sufriendo con un dolor inmenso", agregó la mujer. "Solo pedimos justicia", insistió.
El caso es investigado por la UFI 6 de Lomas de Zamora, y cuenta con un hombre detenido, que ya tiene prisión preventiva. Sin embargo, la familia damnificada sostiene que el fuego habría sido provocado por más personas que "siguen libres".
Jorge, de 30 años, y Benjamín, de 13, fallecieron como consecuencia de la tragedia, ocurrida el 18 de septiembre pasado en Fiorito. "Benjamín era un niño de 13 años con discapacidad. Lo acusaron de tocar a otro niño con el que jugaban. Sin dar pruebas ni intención de dialogar como padres y comprender el contexto fueron directamente a matarlo", afirmó Micaela, hermana de las víctimas.
En los videos a los que tuvo acceso este medio, se ve a un grupo de personas en frente de la vivienda de las víctimas, con un foco de incendio evidente, mientras arrojan piedras y pintan "violadores" en la pared, con aerosol.
El pasado 27 de septiembre, la escuela especial donde estudiaba el niño organizó una misa en su memoria, y para reclamar justicia. Por ahora, la causa sigue caratulada como "incendio seguido de muerte y daños".
"A Benjamín lo asesinaron en banda, más de 15 personas para un nene de 13 años. Su cuerpo se encontró totalmente carbonizado", indicó Micaela, mientras que sobre su otro hermano, precisó: "Jorge, con el 80% del cuerpo quemado, no resistió y falleció en el Gandulfo".
Añadió también que la casa de su madre "quedó destruida del incendio por las bombas molotov de esos criminales", que en su mayoría seguirían libres.