al horno Incluso con la ayuda del FMI, el drenaje de dólares continua. En las góndolas desde hoy hay nuevos precios, entre un 3 y 9% más altos.
Agosto no será un mes relajado para el gobierno de Javier Milei. Es que el veranito de la salida del cepo llegó a su fin y el dólar en las últimas semanas fue expandiendo su valor y, como naturalmente ocurre, esto ya tiene consecuencias en los precios de los productos de consumo masivo.
El economista y consultor Orlando Ferreres pronosticó que para agosto habrá una inflación de "más de un 2 %" y que "puede llegar al 3%", debido a las correcciones al alza en el tipo de cambio, pero consideró que "tampoco va a ser un aumento muy grande" y adelantó también que la consultora que encabeza prevé para el mes de julio que acaba de terminar "una inflación minorista de 1,8%".
La devaluación había sido presentada como "dólar flotante" de entre $1.000 y $1.400 el dólar. Pero incluso con la ayuda del FMI, el drenaje de dólares continuó y el tipo de cambio ya está llegando al límite de la banda, casi $1.400.
Todo el plan económico de Milei y su ministro Luis Caputo se basa en una sola premisa: el problema es el déficit fiscal. Sin embargo, pese al achique del Estado con miles de trabajadores despedidos, jubilaciones a la baja y ajustes en Educación y Salud, aún el problema persiste y la economía comienza a ser un fierro que se va calentando.
La toma de deuda es, hasta el momento, la única posibilidad que se plantea el Gobierno y esto, lógicamente, encarece los productos.
En las góndolas desde hoy hay nuevos precios, entre un 3 y 9% más altos por el impacto del alza del tipo de cambio. Los aumentos vienen de la mano sobre todo de algunas de las grandes empresas alimenticias y de artículos de limpieza como Mondelez, Unilever, Arcor, Colgate y Mastellone.
Los productos de Arcor aumentaron entre un 3% y 5%; Mondelez, entre 7 y 9%; Unilever, 8%; Softys, 7%; Mastellone-La Serenísima, 4%; SC Johnson, 7%; Aceitera General Deheza y Cañuelas, 5%.