CAMBIO EN LA CAUSA Un nuevo fiscal se hizo cargo de la causa, que tiene dos prófugos por el crimen de la joven de 17 años, encontrada descuartizada en la estación Kilómetro 34.
El caso Candela Azoya pasó a la órbita de una nueva fiscalía que se hará cargo de la investigación de la causa, que fue caratulada como femicidio, y que tiene dos sospechosos prófugos.
Fuentes judiciales consultadas por La Unión confirmaron que el expediente pasó a manos de la UFI 12 de Lomas de Zamora, a cargo del fiscal José Luis Juárez. La misma es especializada en la temática de violencia de género.
Vale la pena remarcar que el único detenido, está imputado por el delito de "homicidio doblemente agravado, en contexto de violencia de género y concurso premeditado de tres o más personas". Se trata de un sujeto identificado como Carlos Azoya, primo de la víctima.
El fiscal Juárez estará a cargo de supervisar las tareas de búsqueda de los hermanos implicados en el crimen, que se fugaron del barrio luego del macabro hallazgo de los restos de la adolescente, cuyo torso todavía no fue encontrado, e impide avanzar en la autopsia necesaria para corroborar la mecánica del asesinato.
El miércoles a la tarde, las autoridades realizaron nuevos rastrillajes en inmediaciones de la estación Kilómetro 34 del Tren Roca, para intentar encontrar las partes restantes del cuerpo de la joven de 17 años.
EL FEMICIDIO DE CANDELA AZOYA
Los investigadores del caso pudieron reconstruir que la joven había pactado la compra de unas zapatillas y salió de su casa el 27 de noviembre pasado, para ir a buscarlas a la Plaza San Marta. Sin embargo, no regresó, y su familia denunció su desaparición. Finalmente, dos días después, se enteraron de que el cuerpo de Candela había sido hallado descuartizado y quemado dentro de una bolsa en la estación Kilómetro 34.
Horas después empezaron a saberse más datos gracias a testimonios de vecinos. Relataron que la adolescente había sido vista el mismo miércoles de su desaparición, acompañada por un hombre y una mujer, caminando sobre la calle Copihue con sentido hacia Voltaire. La investigación determinó que ese hombre habría sido su primo Carlos, de 22 años, mientras que la mujer era su novia.
Por otro lado, la Policía realizó un allanamiento en un domicilio de la calle Terrada al 2900. Se cree que Candela habría llegado a esta casa acompañada justamente por su primo. El lugar, presuntamente usado como búnker de drogas, era frecuentado por dos hermanos, quienes son señalados por la familia como los asesinos de la joven.