MEGAOPERATIVO Hubo 50 procedimientos simultáneos en Buenos Aires y Córdoba. Los involucrados habían provocado pérdidas por $80 millones.
En una serie de 50 allanamientos simultáneos en Buenos Aires y Córdoba, detuvieron a 30 personas involucradas en ciberestafas millonarias que provocaron pérdidas por más de 80 millones de pesos. Hubo operativos en Lomas de Zamora y se incautó una gran cantidad de dinero.
La investigación, iniciada por el Ministerio Público Fiscal bonaerense, empezó a partir de varias denuncias sobre accesos indebidos a cuentas de empresas a través del home banking, mediante la utilización de un malware bancario instalado en las computadoras de las víctimas. Por ejemplo, uno de los damnificados había recibido un documento infectado, lo descargó y días después, su home banking le requirió una "validación" de contraseña. Después de eso, perdió el control de su computadora y su cuenta fue vaciada.
En general, se detectaron maniobras de phishing e ingeniería social, que devinieron en operaciones bancarias fraudulentas denunciadas por el Banco Provincia. Además, se registraron casos donde los estafadores se hicieron pasar por personal bancario o de ANSES, con el fin de tomar control de las cuentas de las víctimas.
Finalmente, hubo personas que fueron estafadas por falsos compradores de Marketplace, quienes enviaban comprobantes de transferencias falsos por WhatsApp y solicitaban a los vendedores que los validen en un cajero automático. Al hacerlo, perdían el control de la cuenta.
Mediante las pruebas obtenidas, se ordenaron 50 allanamientos simultáneos en localidades como Lomas de Zamora, Lanús, Avellaneda, Villa Domínico, Adrogué, Florencio Varela, Ezeiza, Sarandí, Bernal Oeste, Morón, Tolosa, Zárate y González Catán. También hubo operativos en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y en la provincia de Córdoba.
Los efectivos policiales detuvieron a 30 personas y secuestraron una suma importante de dinero en efectivo, pesos y dólares. También incautaron armas de fuego, computadoras, teléfonos celulares, tarjetas de memoria, pendrives, tarjetas SIM, tarjetas de crédito y débito, y posnets.
Del operativo participó personal del Departamento de Ciberdelitos del Ministerio Público de la provincia de Buenos Aires, la Superintendencia de Investigaciones de Delitos Complejos y Crimen Organizado, la Dirección Investigaciones Cibercrimen bonaerense y la Dirección General Cibercrimen de la Policía Federal Argentina con las Divisiones Delitos Tecnológicos, entre otras.
Se calcula que las ciberestafas provocaron pérdidas por más de 80 millones de pesos. Los detenidos quedaron a disposición del magistrado interventor, imputados por los delitos de "defraudación informática" y "estafa".