VIOLENCIA DE GÉNERO El exfutbolista de Boca y Lanús fue condenado en abril. Ahora afronta otra grave acusación por la muerte de su expareja, que se quitó la vida en raras circunstancias.
La causa que investiga por "instigación al suicidio" a Junior Benítez, el exfutbolista de Boca Juniors y Lanús acusado de haber inducido a su expareja a quitarse la vida, cambió de fiscalía y vuelve a Lomas de Zamora. Además, de manera paralela, la familia del imputado podría ser imputada por "cómplice".
De acuerdo al fallo, el caso pasó a manos de la UFI 17 especializada en violencia de género y familiar de Lomas, a raíz de un pedido formal del abogado particular damnificado, Rodrigo Tripolone.
Mientras tanto, el fiscal Juan Manuel Baloira, de la UFI 3 de Almirante Brown, continuará una investigación de manera simultánea e independiente al entorno del exdeportista, por posible "omisión de auxilio". Es decir, están sospechados de ignorar el pedido de ayuda de la víctima, Anabelia Ayala.
El 29 de agosto pasado, Benítez había sido convocado por la Justicia para ser indagado en el marco del caso, originado tras la muerte de la joven, que se quitó la vida a principios de este año, luego de varias denuncias por violencia de género, en hechos reiterados, que habría sufrido durante años, y en distintos países.
Una amiga de la víctima declaró semanas atrás, y complicó más la situación del procesado. La joven relató una serie de aberrantes episodios que reafirman el maltrato y los abusos que cometía Benítez hacia Ayala.
El testimonio cobra relevancia porque es la primera vez que alguien confirma que Ayala era abusada sexualmente. Anteriormente, todos los relatos hablaban de abuso psicológico y violencia de género, además de un control y una vigilancia enfermiza por parte del exjugador hacia ella.
Actualmente, el acusado está preso por "coacción agravada, daño informático, amenazas, desobediencia y tenencia ilegal de arma de guerra", por agredir y amenazar a la familia de Ayala. Fue en enero pasado cuando lo condenaron en los Tribunales de Lomas a cuatro años y ocho meses de prisión efectiva por agredir y amenazar a los padres de Ayala.
El exjugador de fútbol había sido detenido en enero de 2024, días después de que Ayala se quite la vida, ya que la Justicia comprobó que, previo a la triste decisión, Benítez había violado el arresto domiciliario para hostigarla.