mundos personales Hace una década partía una de las grandes figuras del cine y del teatro argentino, que supo brillar en sus interpretaciones dramáticas y en la comedia.
El 11 de abril de 2014, hace una década, murió el recordado actor Alfredo Alcón, considerado el máximo exponente del teatro clásico en Argentina y que también fue un comediante increíble.
Había nacido en Ciudadela, el 3 de marzo de 1930, aunque otras versiones hablan del barrio porteño de Liniers, como Alfredo Félix Alcón Riesgo, quien al egresar del Conservatorio Nacional de Arte Dramático ingresó al ciclo "Las dos carátulas", que en 1951 se emitía por Radio del Estado, hoy Nacional, la Radio Pública, aunque al mismo tiempo el contrato lo obligaba a leer informes del Mercado de Hacienda.
A principios de los '50 debutó en los escenarios con "Colomba", inspirada en Próspero Mérimée y dirigida por Juan Carlos Thorry, que fue el principio de una larguísima carrera en las tablas y el ingreso en el cine con "El amor nunca muere", de 1955, como galán de Mirtha Legrand.
Debió ser el galancito durante un puñado de films, de Tita Merello, otra vez de Legrand, de Graciela Borges en "Zafra", debut de la actriz.
El filme de Leopoldo Torre Nilsson (1960) fue sin embargo la consagración de Alcón y éxito de público, pese a que el futuro gran actor suponía que el personaje era "propiedad" de Francisco Petrone, quien lo había encarnado varias veces.
Siguió brillando bajó la lente del gran director en "Piel de verano", "Martín Fierro", "El santo de la espada", "Güemes, la tierra en armas", "La mafia", "Los siete locos", "El pibe Cabeza" y "Boquitas pintadas".
También mostró sus credenciales en "Los inocentes", del español Juan Antonio Bardem, "Prisioneros de una noche" y "¿Qué es el otoño?", de David José Kohon, "Nazareno Cruz y el lobo", de Leonardo Favio, "Pubis angelical", de Raúl de la Torre.
En 1978 rodó en España "Cartas de amor de una monja", de Jorge Grau, junto a Analía Gadé, prohibida en la Argentina durante años y en la que ambos cumplían escenas con desnudos que sorprendieron a los pocos que concurrieron tiempo después a su estreno en el ex cine Gloria.
En teatro actuó con éxito no sólo en la Argentina sino también España, además de otros países, sobre autores como Arthur Miller, Tennessee Williams, Henrik Ibsen, George Tavori, Eugene O`Neill, Neil Simon y Juan Villoro.
Su último trabajo teatral fue un año antes de su partida con "Final de partida" de Samuel Beckett junto a Joaquín Furriel en el teatro Gral. San Martín.
En TV se recuerdan sus trabajos en Yerma (1963) y Hamlet(1964), dirigidas por David Stivel, Otelo, Por el nombre de Dios, Vulnerables, Locas de amor y Herederos de una venganza (2011), su última aparición en la pantalla chica.