polémica Lo informó en forma oficial el vocero presidencial Manuel Adorni. Es uno de los espacios culturales más importantes de América latina.
El Gobierno nacional le cambiará el nombre al Centro Cultural Kirchner (CCK), en una nueva y polémica decisión del Ejecutivo.
La intención de modificar la denominación al espacio ubicado en el ex-Palacio del Correo y Telecomunicaciones fue confirmado por el vocero presidencial, Manuel Adorni. "Se ha decidido finalmente cambiar el nombre al Centro Cultural Néstor Kirchner, así que dejará de llamarse como tal y se le dará paso a un nuevo nombre", señaló el portavoz en conferencia de prensa.
La nueva denominación del espacio cultural aún no fue definida, según confirmó el funcionario en su habitual contacto con los medios acreditados.
LA HISTORIA DEL CCK
El CCK es uno de los centros culturales más grandes de Latinoamérica y funciona en el edificio construido en 1889, que fue el Palacio de Correos y Telecomunicaciones, en la manzana ubicada entre las Avenidas Leandro N. Alem y Corrientes y las calles Sarmiento y Bouchard.
Su reversión fue inaugurada el 25 de mayo de 2015 por la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner, que lo nombró en honor al expresidente Néstor Kirchner, quien había fallecido cinco años antes.
El CCK es un espacio moderno, amplio y diverso dedicado a diversas manifestaciones artísticas que incluyen conciertos, recitales, exhibiciones de artes visuales, eventos de literatura, poesía, artes performáticas y nuevas tecnologías, talleres, festivales, proyecciones, homenajes, ferias y una programación específica para la infancia.
Tiene más de 100 mil metros cuadrados y la envergadura de los centros culturales más importantes del mundo.
Entre sus principales atractivos se encuentra La Ballena Azul, una sala de música sinfónica para 1.750 espectadores; una Sala de Música de Cámara para 540 personas; y la Gran Lámpara, un espacio de 2 mil metros cuadrados destinado a exhibiciones, que se ubica en el sexto y séptimo piso y está revestido por placas de vidrio que emiten luz.
Las antiguas oficinas se transformaron en espacios para proyección de videos, conferencias y exposiciones. Además, hay seis salas auditorios para más de 100 espectadores.
En la cúpula, un vidrio facetado y un sistema de luces led se convirtió en un gran foco de atención. Esta área cuenta con un escenario levadizo, bancos laterales de pinotea, luces escénicas y un exclusivo sistema de refrigeración.
También es muy impactante la obra móvil donada por el artista mendocino Julio Le Parc. Su "Esfera azul", hecha con placas de acrílico, corona el hall de ingreso del edificio.