está que arde La participante uruguaya le contó a Virginia: "Me dieron muchas ganas, ¿qué hago?". La veterana le dio un claro consejo.
En Gran Hermano, Rosina generó una sorpresa al acercarse a Virginia, la participante de 55 años, para hacerle una confesión sexual y pedirle un consejo.
La uruguaya se acercó a la jugadora de mayor edad de la casa y, tímidamente y en un susurró, le dijo en inglés: "horny". Virginia no entendió de qué le hablaba y la joven uruguaya le tradujo, sin vueltas: "Estoy caliente".
"Ay, ¿con quién?", preguntó Virginia, en la creencia de que lo que quería decirle su compañera de reality era que sentía deseo sexual por alguna otra persona de la casa. "No, con nadie. Pero me dieron ganas", le contestó Rosina. Y destacó: "Pero muchas, muchas ganas. Nunca me pasa esto".
A continuación, le pidió algún consejo para superar esa excitación: "¿Qué hago? ¡Quiero gritar, quiero hacer algo, porque estoy tensionada!".
Sin ningún problema Virginia, la participante que fuera de la casa se dedicaba al stand up, le fue dando una serie de tips."Pensá en cosas que te calientan, en situaciones, y tratá de refregarte un poquitito con las piernas el clítoris", le propuso.
"¿Dónde? ¡Acá te ven todos!", se preocupó Rosina. "Tiene que ser en la cama a la noche", le indicó Virginia.
"Pensá en situaciones que te calientan mucho. Refregá un poquitito el medio, y si no podés refregarte sola, porque no sabés, metete algo en el medio... Una remera o algo así", le aconsejó Virginia mientras Rosina la escuchaba atentamente, decidida a resolver de un modo un otro el problema que la aqueja.