categórico El abogado de la familia de Silvina Luna fue lapidario con el cirujano, luego que este diera una polémica entrevista desde la cárcel.
A casi cuatro meses de la detención de Aníbal Lotocki por la muerte de Cristian Zárate en 2021, el cirujano habló por primera vez desde el penal de Ezeiza donde aseguró que no es un preso VIP, que no le parece justo estar preso y que el tiempo perdido no lo recupera más.
Desde su pabellón, Lotocki habló con Socios del Espectáculo sobre su vida en el penal y su estado procesal: "No estaba en mis planes estar acá, no me parece justo. Una prisión preventiva... no fui enjuiciado, no tengo condena, no debería estar acá".
Días previos a que se diera a conocer esta charla por el programa de El Trece, trascendió que el nuevo abogado, Claudio Lifschitz, presentó en Comodoro Py una denuncia en la que asegura que fue engañado por el laboratorio que le vendió el metacrilato y que utilizó para colocárselo a varias de sus pacientes.
Lo que señala en la denuncia es que él compró el producto en el laboratorio Allanmar y que nunca supo que estaba fuera de norma o no autorizado.
Luego de esta entrevista, Fernando Burlando, abogado de la fallecida Silvina Luna, compartió un duro descargo en las rede sociales.
"Los dichos de Lotocki espantan, horrorizan. Son la comprobación, por si hiciera falta, de su desequilibrio emocional, moral y profesional. Nos está diciendo que sus víctimas no son víctimas, que son apenas denunciantes y que todo el dolor, el sufrimiento y la agonía que padecieron no han sido reales, no cuentan, no hacen la cuestión. Con su alegoría de la cortadora de césped nos está insultando y lo que es peor e indignante es que está insultando a las víctimas y a sus familias", comenzó el letrado.
"Yo pensé que en este tiempo de encarcelamiento Lotocki había podido reflexionar y acercarse a una forma de autocrítica que alguna vez le abra las puertas del arrepentimiento. Pero compruebo con horror que no, que ha sido al revés, que el encierro ha potenciado su perversidad, su soberbia, su desprecio por la vida y sentido de la impunidad. Ahora la culpa la tiene, según su nueva fantasía, el fabricante del veneno que suministró a sus víctimas. Salvando las distancias, es Jack el Destripador haciendo responsable al fabricante de la navaja que usaba. ¿Tengo que repetir los motivos de su detención?", compartió en sus redes sociales junto a una imagen de Silvina Luna.