TV Retro Forma parte de las creaciones de Chespirito. Se fue ganando su lugar y también quedó en el centro de la polémica.
Además de El Chavo del 8 y de El Chapulín Colorado, Roberto Gómez Balaños creó otros disparatados personajes como El Doctor Chapatín.
Detrás de los personajes estelares de Chespirito, un médico ya entrado en años al que le falta al menos un tornillo, se fue ganando su lugar en la serie.
El Doctor Chapatín apareció allá por 1968 en el programa Los supergenios de la mesa cuadrada, una suerte de una parodia de las mesas redondas de análisis de aquella época.
En aquel entonces se llamaba doctor Chespirito Chapatín y se dedicaba a contestar cartas de televidentes y con salidas completamente absurdas.
Luego pasó a tener su propio segmento en Chespirito, el nuevo programa del artista mexicano. Al finalizar la serie, continuó su sección como intermedio en los programas El Chapulín Colorado y El Chavo del 8, y desde 1980 hasta 1995 continuó dentro de la serie Chespirito.
Este alocado médico, también participó en varias películas de Chespirito El Chanfle (1979), El Chanfle 2 (1982), Don Ratón y don Ratero(1983) y Charrito (1984).
Cada uno de los personajes creados por Chespirito tenía su propia personalidad bien definida y una características muy particulares.
En el caso de El Doctor Chapatín, se trataba de un anciano de carácter irascible y con un sentido del humor sarcástico.
Siempre lleva consigo una bolsita de papel que nunca se sabe lo que hay adentro y que le da cierto misterio al personaje.
Según Gómez Bolaños en la famosa bolsa "tiene los rencores, las envidias y sus defectos, para que no se le escaparan nunca y así no soltarlos para ofender a la gente".
Además, la usa con gran frecuencia para golpear a otras personas en especial a los se burlan de su gran cantidad de años. "¿Insinúa que soy viejo"?, suele preguntar y reacciona de la peor manera cuando no le gusta la respuesta.
Otras de sus salidas habituales es con la frase "¡Ya me dio cosa!" o ¡Me da cosa!", mientras hace ruido en los dedos cuando algo le da asco.
Entre otras cuestiones, escucha poco y nada, tiene escasa paciencia y un carácter pésimo con todo el mundo.
Con escaso nivel profesional, promueve impunemente el uso del jarabe de isbiluriparangalicutirimicuarodol y de los comprimidos de bisbiluriparangalicutirimicuarolina. Mientras que si no hay ninguno de estos medicamentos en la farmacia, recomienda el uso de pastillas de menta.
Siempre suele estar en su propio consultorio, que es atendido su leal enfermera, papel interpretado primero por María Antonieta de las Nieves y luego por Florinda Meza.
Su consultorio no es gran cosa y es bastante anticuado. Tiene un esqueleto, una máquina de escribir, un escritorio y poco más. Hace todo lo posible pasar sacarle el mayor dinero posible a sus pacientes con intervenciones quirúrgicas innecesarias, o pidiéndoles que paguen la consulta por adelantado.
Una de sus estrategias comerciales que ha empleado para ganar pacientes es ir personalmente a tocar a las casas para dar consultas y que le paguen.