REVELADOR Tenía 17 años y desapareció el 2 de septiembre, cuando fue a bailar a un boliche de Villa Celina. El informe forense mostró detalles reveladores.
La autopsia del cuerpo de Román Ramírez Zarate, el joven de 17 años que fue encontrado sin vida en el Riachuelo, a la altura del Puente La Noria, en Ingeniero Budge, reveló algunos detalles importantes para la investigación.
Según señalaron fuentes judiciales a La Unión, el informe forense determinó que el adolescente murió ahogado, y que el cadáver no presentaba signos de violencia o de defensa. Además, llevaba entre 7 y 10 días fallecido, justo el periodo de tiempo que llevaba desaparecido.
Por otro lado, los voceros del caso indicaron que no faltaba ninguna de sus pertenencias, por lo que descartaron la hipótesis de un intento de robo seguido de muerte.
Mientras tanto, el fiscal Gerardo Mohoraz, de la UFI 6 de Lomas de Zamora, espera el resultado de la pericia toxicológica realizada en algunas muestras tomadas recientemente. Esa información podría confirmar la teoría de que el menor estaba desorientado a raíz de algo que habría consumido dentro del boliche donde había ido a bailar la noche de su desaparición.
"Es un abanico muy grande de opciones, una podría ser que quiso orinar y se patinó en la vegetación, cayendo al agua", confió a este medio una fuente cercana a la investigación.
Román Ramírez Zárate, de 17 años, era intensamente buscado desde el 2 de septiembre, cuando había salido a bailar a un boliche en Villa Celina. Un amigo contó que lo vio irse repentinamente y nadie volvió a saber sobre él, hasta que se confirmó la triste noticia de su muerte.
En las últimas imágenes en las que se lo ve con vida se observa que desciende de una unidad de colectivo de la línea 80, y camina en dirección a la Avenida General Paz.