CRIMEN DE "LECHUGA" La causa tiene cuatro nuevos detenidos y dos sospechosos prófugos. Para el letrado, se cayó la hipótesis principal que sostenía la detención de su defendida.
Luego de la serie de detenciones concretadas este lunes en el marco de la investigación por el crimen de Fernando Pérez Algaba, el abogado de Nicol Chamorro, la mujer trans detenida por el asesinato del empresario, se mostró confiado en que sea excarcelada en las próximas horas.
"Estamos en condiciones de decir que no hay elementos suficientes para que ella esté detenida, por lo tanto, creemos que es inminente su liberación", expresó Marcelo Ponce, en diálogo con La Unión.
El letrado estimó que uno de los principales argumentos para mantener tras las rejas a su defendida, era que se le atribuyó ser la última persona que tuvo en su poder la valija en la que apareció parte del cuerpo de la víctima, en Ingeniero Budge. Sin embargo, esta hipótesis se habría caído recientemente.
Es que uno de los cuatro nuevos detenidos que tiene la causa es un sujeto identificado como Luis Alberto Contreras, hermano de Chamorro, que, según contó Ponce, sería el verdadero dueño de la valija donde encontraron los restos del empresario.
Mientras tanto, la mujer trans sigue tras las rejas, a la espera de un fallo favorable, tras los avances en la investigación. Días atrás, se le había negado la excarcelación, aunque esto podría cambiar próximamente, antes de que venza el plazo para determinar si pasará a cumplir prisión preventiva hasta el juicio.
La sospechosa había sido apresada en su vivienda de la calle Murature al 3000, de Villa Caraza, Lanús, y pasó a ser la primera detenida que tuvo la causa, situación que se mantuvo hasta este lunes, cuando se realizaron 18 allanamientos simultáneos en distintos domicilios del Conurbano bonaerense y la Capital Federal.
Como resultado del operativo, detuvieron a Matías Ezequiel Gil, Fernando Gastón Martín Carrizo, Luis Alberto Contreras y Flavia Lorena Bomrad, quienes serán indagados este mediodía por el fiscal Domínguez.
Los cuatro están imputados por el delito de "homicidio cuádruplemente agravado por haber sido cometido mediante el uso de arma de fuego, con alevosía, por codicia y por el concurso premeditado de dos o más personas", en perjuicio de Pérez Algaba, conocido como "Lechuga", que prevé una pena de prisión perpetua.
Para el fiscal Marcelo Domínguez, el móvil del crimen fue una deuda por US$50.000 y por 17 terrenos que Maximiliano Pilepich debía entregarle a la víctima, quien, con el fin de cobrarla, fue la tarde del 18 de julio hasta el predio de General Rodríguez a encontrarse con él.