mundos personales Hace 30 años el Carpo salía a escena en el mítico reducto neoyorquino invitado por una de las grandes leyendas del blues.
Hace 30 años, el 10 de agosto de 1999, Pappo tocaba en el Madison Square Garden de Nueva York especialmente invitado para un show de su colega estadounidense B.B. King, uno de los músicos más influyentes de la historia del blues.
"Esta noche estamos muy orgullosos de tener un invitado especial venido desde la Argentina, uno de los grandes del mundo. Damas y caballeros, desde la Argentina: Pappo. Así es como suena el blues allá", dijo el legendario guitarrista estadounidense.
En el recital participaron otras leyendas del género, como el guitarrista Buddy Gay y la cantante Koko Taylor.
El Carpo se había comprado un elegante traje de seda italiano para esa velada y el micro de la gira de B.B.King lo pasó a buscar por la puesta del hotel donde estaba parando.
Luego de aquel concierto, Pappo declaró para el Suplemento Sí!: "Tocar esta noche en el Madison es como tocar en casa. Ellos me hacen sentir así. Acá no se toca ni con los dedos ni con la mente. Se toca con el alma, porque es blues. Hay que poner todo el sentimiento y las lágrimas ahí arriba".
"THE CHEESEMAN"
Desde su primera visita a la Argentina, en 1980, cuando no abundaban los show internacionales por estos lados, B.B. King forjó una especial relación con el país.
A Pappo lo adoptó como amigo y lo rebautizó como "The Cheeseman", por la horma de queso que el hombre oriundo del barrio porteño de La Paternal le había llevado de regalo al camarín de Obras, en aquel lejano 1980.
B.B. King había sido traído al país por Carlos "Pirimpimpín" Geniso, un exmúsico devenido empresario, quien, según cuenta la leyenda, perdió sumas millonarias de dinero por esa jugada aventura.
Sin embargo, el artista tomó nota de esta situación y en sus posteriores visitas puso como condición que Geniso estuviera involucrado en la negociación, aunque esto implicara dejar de lado ofertas más jugosas.
Precisamente, esa primera visita también sentó las bases de su relación con Pappo, quien pasó por camarines para saludar con un queso de regalo y un vino de regalo.
En esta visita, Pappo logró sacarse una foto en la que también aparecen Héctor Starc, Willy Quiroga y Rinaldo Rafanelli.
Ya en los primeros años de los '90, cuando las visitas internacionales eran cosa de todos los días gracias a la ley de convertibilidad, B.B.King regresó en varias ocasiones y, en todas ellas, daba la oportunidad de que algún número local se encargara de abrir el show.
Pappo fue uno de los artistas que tuvo ese privilegio y su performance resultó tan arrolladora que el propio rey del blues pidió, al escucharlo mientras ingresaba al estadio, que lo invitaran a sumarse a su concierto.
Este primer encuentro musical en 1992 en Obras fue el origen del convite del músico al argentino a ser parte de una de sus presentaciones en el mítico reducto neoyorquino. "Mi amigo Pappo", solía decir cada vez que alguien le mencionaba al músico local y su rostro denotaba tristeza cuando, tras su muerte en 2005, lo recordaba. El legendario blusero vivió una década más y partió en 2015.