todo mal El conductor de "Resto del Mundo" reconoció haber tomado "una copa de más" en Bariloche, durante las grabaciones de su programa.
Fede Bal viajó a Bariloche para grabar imágenes para el programa "Resto del Mundo", su programa de El Trece, y terminó dando positivo en un control de alcoholemia.
En un control de tránsito, el actor y conductor dio positivo en el control de alcoholemia y deberá pagar una multa de $130 mil para recuperar su vehículo y su licencia.
"Debe presentarse en el Juzgado de Faltas con copia de DNI y se le da la sentencia. Puede presentar un descargo para dar cumplimiento con lo establecido por la ordenanza. Tiene que proceder a hacer un curso de readecuación para el correcto uso de la vía pública y el de concientización sobre el consumo del alcohol", detalló el subsecretario de Tránsito y Transporte de Bariloche, Daniel Pincheira, a Cadena 3.
Además, afirmó que el actor y conductor reconoció haber tomado "una copa de más": "Tenemos una ordenanza que establece que el alcohol en sangre no debe superar los 0,5 gramos. Fueron 0,20 gramos de más los que llevaron a secuestrarle el vehículo".
"Debe aprobar los exámenes tanto teóricos como práctico para recuperar la licencia. Por la cantidad de alcohol en sangre, tiene el mínimo de la multa que ronda los $130.000 aproximadamente y el tiempo de suspensión de la licencia de 30 días", detalló.
LA BRONCA DE CARMEN
Mientras que su mamá, Carmen Barbieri, habló del tema en su programa "Mañanísima" y retó a su hijo por su accionar: "Le pregunté '¿qué paso?'. Y él me dijo 'nada, mamá. Tomé una latita y media de cerveza'".
"Yo le dije que siempre tiene que decirles a los amigos que manejen porque aunque tome una latita ya tiene alcohol en el cuerpo", agregó.
"Él estaba llegando al hotel y ahí lo pararon. Le sacaron el auto. No estaba alcoholizado, pero no se maneja ni con una gota de alcohol. ¡Cómo gritaba yo! Me encerré en el camarín de Los 8 Escalones y le dije de todo", reveló la conductora.
"Y él me decía 'mamá, soy un hombre'. Y yo '¿sos un hombre? ¡Sos mi hijo! ¡Te dije que no manejes!'. Salí del camarín loca. Me llevaban los demonios. Me puse nerviosa, como cualquier madre. ¡¿No saben cómo gritaba?! Ay, se me pone la piel de gallina. Le dije de todo. No lo insulto. Pero le dije de todo. Yo le colgué el teléfono, pero antes de cortar le dije '¡crecé! Y me fui como loca", finalizó.