CON UNA TIJERA Según la víctima, la acusada la quiso apuñalar en la cabeza con una tijera, en frente de sus hijos. Ahora teme represalias, y pidió una restricción perimetral.
Una barbera que tiene su local en Llavallol fue denunciada por una exempleada, quien la acusó de haberla atacado con cascotes y de intentar apuñalarla en la cabeza con una tijera, durante una violenta pelea a trompadas que tuvieron en la calle.
La presunta víctima, María Bootz, contó a La Unión que teme represalias de la acusada y que el temor no es solo por ella, si no también por sus hijos. "Estamos muy cerca, es posible que podamos cruzarnos en cualquier lado, por eso trato de no andar sola", advirtió.
La joven, que tiene 24 años y es madre de dos niños, pidió la restricción perimetral, como método de prevención para evitar otro episodio desagradable como el que protagonizó días atrás, y que quedó filmado por un testigo, donde se ve el momento en que ella y la mujer denunciada se golpean y tiran de los pelos.
Sin embargo, la violencia no habría terminado allí, debido a que, según contó María, la agresora la siguió hasta su casa para seguir la pelea, ahora en presencia de los menores.
De acuerdo a la denuncia, la atacante, de 30 años, y que tiene su local "Ladi Barber", sobre Doyhenard 1400, la comenzó a agredir de manera verbal, para luego comenzar con los golpes de puño, aunque aseguró desconocer el origen del conflicto con su ex empleadora, a quien, además, le cuidaba los hijos menores de edad.
"Al llegar a su casa junto a sus hijos, observó que se encontraba la agresora, con dos rocas grandes en su manos y que la seguía agrediendo verbalmente mientras sus hijos lloraban", consta en la denuncia.
Además, de acuerdo a su declaración aportada a la Justicia, la barbera habría intentado ingresar a la fuerza a su casa. "Le arrojó las piedras y se volvieron a tomar a golpes, hasta que la agresora sacó un tijera plateada que le quiso hundir en la cabeza, pero solo le provocó un raspón", agregó en la acusación.