orgullo argentino El film de Santiago Mitre va por la tercera estatuilla para el país, luego del gran recorrido internacional que viene teniendo.
Este domingo tendrá lugar la 95ta. entrega de los premios de la Academia de Hollywood. "Argentina, 1985", el film de Santiago Mitre que retrata la tarea de los fiscales Julio Strassera y Luis Moreno Ocampo al frente del Juicio a las Juntas tras la última dictadura cívico-militar, mantiene las ilusiones de obtener el tercer Oscar para el cine nacional.
La entrega se podrá seguir el domingo desde las 20 por HBO Max y TNT.
La película de Mitre, con las notables actuaciones principales de Ricardo Darín y Peter Lanzani, llegará a la ceremonia que tendrá lugar en el Dolby Theatre de Los Ángeles luego de un gran paso por el circuito de festivales y la temporada de premios, un recorrido que comenzó con su premiere mundial y reconocimientos en el Festival de Venecia en septiembre pasado.
Zúrich, San Sebastián, Londres y La Habana fueron otros destinos de las citas cinéfilas internacionales en los que la producción pisó fuerte, como preludio de las entregas de galardones de la critica y de la industria que eligen lo más destacado de 2022: en ese terreno, recibió nominaciones en los Critics' Choice Awards y los Bafta británicos, y triunfó en los Globos de Oro y en los Goya.
Ahora participará en la máxima fiesta del entretenimiento estadounidense por el Oscar a Mejor película internacional, que Argentina disputó en otras siete ocasiones durante los últimos 50 años y que consiguió en dos oportunidades, con La historia oficial (1985), de Luis Puenzo, y El secreto de sus ojos (2009), de Juan José Campanella. Y con un espíritu mundialista que se repite en forma de estatuilla, aguarda por ganar la tercera. ¿Qué panorama le espera?
Además de compartir la forma narrativa tradicional establecida por Hollywood desde inicios del siglo pasado, con su camino del héroe como hilo conductor, Argentina, 1985 es capaz de dialogar con un presente global en el que las democracias estuvieron más de una vez bajo amenaza y fueron objeto de preocupación y discursos diplomáticos en la pospandemia, trayendo una temática de noble corte político que bien podría favorecerla entre los miembros de la Academia.