recomendado El legendario artista regresa a la Argentina luego de 40 años para tocar sus clásicos en Mi Club. En esta vuelta recordó a su amigo Sandro.
Danny Rivera, el legendario artista portorriqueño de recorrido internacional, regresa a la Argentina luego de más de cuatro décadas para salir a escena con sus clásicos este domingo en Mi Club, en Banfield.
"No venía desde los '80, desde hace 40 años. La última vez participé en un festival y después vine a grabar con Horacio Malvicino. Siempre estuve en contacto con la cultura argentina, con la música y con la literatura. Es un lugar muy agradable, tengo empatía con Argentina, buenas vibraciones", le cuenta Danny a La Unión.
En este regreso destaca que el país conserva la "combinación de pasado y presente y de Europa y América latina, y la velocidad que tienen siempre está".
En esta vuelta a la Argentina tocará en Mi Club, un histórico reducto de Banfield, donde será un hecho histórico que un artista internacional salga a escena en vivo.
"Voy a tocar mis canciones emblemáticas y algunos éxitos, como 'Va cayendo la lágrima' y 'Para decir adiós'. También voy a tocar una versión de 'Tu alma golondrina', de Jairo, un artista que admiro mucho', adelanta.
Para Danny el recuentro con el público argentino será un "un reto y una sorpresa" y también espera ansioso tocar en El Club, al que describe como "un lugar muy chévere y bonito. En un lugar donde está la intimidad de la historia, vamos estar celebrando la vida. Un lugar donde se enamoraron los padres de muchos".
"SANDRO ES COMO MARADONA"
Danny Rivera admira a muchos artistas argentinos, con lo que pudo compartir varios momentos, y también al uruguayo Jorge Drexler.
"Me gustan los juglares de la música argentina, como Atahualpa Yupanqui, Jorge Cafrune y José Larralde. Me gusta su dignidad, son sabio que enseñaron a vivir con sus consignas", cuenta.
Al margen de estos notables folkloristas, tiene un gran recuerdo por Sandro y hasta le hizo un homenaje cantando sus canciones.
"Con Sandro me encontré varias veces, en Argentina y en Puerto Rico. Era un tipo jovial, un amigo de barrio, era como Maradona. Siempre fue respetuoso de los artistas, fue empático con la gente. Él ya no está, pero su legado va a quedar para siempre", señala.
UN LARGO CAMINO
La música ha sido un modo de vida para Danny Rivera desde que comenzó cantando en su humilde barrio natal de Santurce, Puerto Rico.
Danny vio cumplida su vocación por el canto, al recibir su primera oferta para cantar en un hotel de San Juan con la popular orquesta de César Concepción. Escogido en el Festival de Popularidad como Cantante Revelación de 1968, los contratos de radio y televisión no se hicieron esperar.
Sus inicios en el mundo del disco se dieron con la grabación "Amor, amor" con el grupo The Clean Cuts. Un año más tarde firmó contrato con la casa discográfica Velvet, con quienes logró comenzar a trascender.
Nunca detuvo su marcha y a mediados de la década del 80, Danny incorporó su propia casa productora, D.N.A., grabando clásicos como "Así cantaba Cheíto González Vol. I y 2" e "Inolvidable Tito".
También logró tres Discos de Oro, cuatro de Plata, tres nominaciones para el codiciado Premio Grammy e incontables placas y premios a través de América Latina.
Además, Danny es el único cantante puertorriqueño logró actuar en tres temporadas distintas en el prestigioso Carnegie Hall de Nueva York.
MÁS INFO
Danny Rivera, el domingo a las 20 en MI Club de Banfield, Cochabamba 249.
Reservas al 11-5407-8033.