importante Los choferes del Grupo DOTA decidieron terminar con la medida de fuerza que afectó a miles de pasajeros después una reunión en el Ministerio de Trabajo.
Miles de pasajeros se anoticiaron esta mañana del sorpresivo paro de colectivos que afectó 50 líneas del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) por un problema en el pago de los suelos. Finalmente, esta tarde, los choferes de la empresa de transporte de pasajeros Dota decidieron levantar la medida de fuerza luego de aceptar una propuesta del Ministerio de Trabajo.
La cartera laboral indicó que "en el transcurso de las próximas horas se volverá a prestar el servicio con normalidad". Por su parte, desde el Ministerio de Transporte de la Provincia de Buenos Aires remarcaron que se encuentran al día con los pagos a las empresas, argumento que a principios de año fue utilizado por las cámaras empresariales para frenar los servicios.
El secretario de Articulación Jurisdiccional del Ministerio de Transporte de la Nación, Marcos Farina, aseguró que la medida de fuerza "no es un paro de la Unión Tranviarios Automotor, sino de un sector de los trabajadores compositores de la dirigencia de la UTA que perdieron la elección en septiembre".
La medida de fuerza alcanzó desde las 0 horas a las líneas 5, 6, 7, 8, 9, 20, 21, 23, 24, 25, 28, 31, 44, 50, 51, 56, 57, 74, 76, 79, 84, 91, 99, 101, 107, 108, 117, 135, 146, 150, 161, 164, 168, 177, 188, 263, 271, 299, 370, 373, 384, 385, 388, 403, 405, 421, 429, 435, 503, 514, 520.
El reclamo, que se origina en una deuda salarial, complicó el traslado de pasajeros y pasajeras desde distintos puntos del Conurbano bonaerense hacia la ciudad de Buenos Aires, y viceversa.
Más temprano, el Secretario General de la Unión Tranviarios Automotor, Roberto Fernández, culpó a la empresa de colectivos DOTA por el sorpresivo paro y la acusó de utilizar a los trabajadores para presionar al Gobierno por el atraso en el pago de los subsidios correspondientes.
En declaraciones radiales, explicó que cuando los choferes llegaron a tomar sus puestos de trabajo se encontraron con los portones cerradas. "Nos encontramos con que la empresa DOTA tenía los portones cerrados. El 24 de febrero el Gobierno debía darle el dinero correspondiente por los subsidios y no lo hizo", señaló el sindicalista.