TRAGEDIA El hombre tenía 43 años. Se ahogó cuando intentaba evitar que los niños fueran arrastrados por la corriente.
Un vecino de Temperley murió ahogado cuando intentaba salvar a sus hijos en el río Limay, en la provincia de Neuquén.
Lo que era un paseo en familia se convirtió en una tragedia para Mateo, un hombre de 43 años que estaba con sus dos hijos disfrutando una tarde en Villa El Chocón, detrás de las usinas de electricidad y de la represa, cerca de un camping elegido por muchas personas para pasar el día.
Según informaron fuentes policiales, todo empezó cuando cruzaron hacia una isla que se había formado producto del bajo caudal que había en ese momento. De manera inesperada, el agua del río Limay empezó a subir y todo fue desesperación.
El vecino de Temperley intentó socorrer a sus hijos para que no fueran arrastrados por la corriente. Ellos lograron llegar a la orilla, pero Mateo desapareció entre las aguas.
La Policía de Neuquén, Prefectura y Gendarmería fueron alertadas de lo que estaba pasando y empezaron rápidamente un operativo de búsqueda con buzos tácticos. Realizaron un rastrillaje en el sector de los pozones, a unos metros de dónde habían visto al hombre por última vez, y pidieron al personal de la represa que bajaran el envío de agua mientras duraba la búsqueda.
Después de siete horas de trabajo, finalmente hallaron sin vida a Mateo. El cuerpo fue visto por un nadador a pocos metros de donde se había hundido, en un pozón de grandes dimensiones. Personal de Prefectura logró retirarlo del agua y luego lo identificaron.