Alegría Miles de familias coparon las calles para vivir una nueva edición del legendario evento organizado por el Municipio y el Círculo Católico.
"¡Mirá ahí vienen!", gritó Mora con alegría mientras su papá Nicolás, emocionado, filmaba el inolvidable momento con su celular. En Lomas fueron miles las familias que coparon las calles para disfrutar de una nueva edición del desfile de Reyes Magos organizado por el Municipio y el Círculo Católico de Obreros.
La previa tuvo lugar en el cruce de Meeks y Laprida, donde artistas locales mostraron su talento mediante números de circo. Mientras que la parte musical estuvo a cargo de la Banda Municipal y El Ensamble Percusión, que con sus ritmos levantaron e hicieron bailar a la gente que esperaba ansiosa el gran momento de la noche.
Pasadas las 20.30 arrancó la caravana con Melchor, Gaspar y Baltazar arriba de tres camionetas acompañados por sus ayudantes "Los Pajes", quienes se encargaron de recibir muchísimas cartas con los pedidos de los chicos y chicas.
"Estamos muy contentos de estar acá junto a nuestro hijo Dante, que el año pasado quiso venir pero por la pandemia decidimos cuidarnos. Ahora lo estamos disfrutando al máximo y verlo a él tan feliz es un regalo hermoso", destacó Mariela, vecina de Banfield.
Funcionarios locales, integrantes de la Cámara de Comercio y del Círculo Católico acompañaron el desfile que, como en cada edición, tuvo el trabajo de Bomberos Voluntarios, Defensa Civil, Emergencias Lomas, agentes de Tránsito y policías que se encargaron de cuidar y controlar toda la jornada.
La calle Boedo estaba repleta de personas que aplaudían, sacaban fotos y saludaban a los Reyes. Varias salieron al balcón de los edificios para tener una visión panorámica de una fiesta que llegó a su edición N°92 y sigue intacta, manteniendo la ilusión y generando alegría.
"Ya vinimos varias veces porque a nuestros hijos les encanta y a nosotros nos da mucha satisfacción compartir algo tan lindo y verlos tan contentos", expresó Matías, que estuvo acompañado por su pareja Natalia y los peques Martín y Soledad.
A los costados de la Avenida Yrigoyen se congregó otra multitud para esperar a los Reyes que, una vez que llegaron a la Plaza Grigera, se subieron a un escenario montado en la intersección con Sáenz. "Gracias por estar nuevamente esta noche con el sueño de los niños. El niño Jesús fue el primero que recibió los regalos de los Reyes y hoy vamos a pedirle al niño que nos regale para nuestra Patria, para Argentina y para las familias la unidad y la paz", señaló el obispo de Lomas, monseñor Jorge Lugones, quien llevó adelante las bendiciones.
El cierre fue con un imponente show de luces de bajo impacto sonoro con el propósito de proteger a las personas y también a las mascotas que sufren los ruidos fuertes. También sonó "Muchachos", la canción que ya es un himno de Argentina campeón del mundo.
En el escenario estuvieron la intendenta Marina Lesci; el jefe de Gabinete del Municipio, Martín Choren; el secretario de Cultura y Educación, Matías Gasparrini; la ministra de Ambiente de la Provincia, Daniela Vilar; el presidente de la Cámara de Diputados de la Provincia, Federico Otermín; y el senador provincial Adrián Santarelli.
Antes del desfile, los Reyes Magos pasaron por el Hospital Gandulfo y los hogares Pereyra, Santa Teresita y San Roque con el objetivo de llevar juguetes a los niños y accesorios de higiene para las personas adultas mayores.