judiciales Ramón Falcón será juzgado por dispararle a su expareja en una panadería en Ingeniero Budge. La victima sobrevivió al ataque.
Juzgarán al hombre acusado de intentar matar a su expareja María Teresa Acosta, la mujer que fue baleada en una panadería en Ingeniero Budge y sobrevivió. Se trata de Ramón Falcón, de 71 años.
Fuentes judiciales confirmaron en diálogo con La Unión que el juicio se llevará adelante el próximo año en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) Nº4 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora.
Falcón, quien es imputado por el delito de "Homicidio agravado por la relación de pareja y por mediar violencia de género en grado de tentativa", será sometido a juicio el 15 de junio del 2023. Se encuentra detenido desde mayo de este año.
En la causa interviene la agente fiscal Fabiola Juanatey, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°2 de Lomas, quien en junio solicitó al juzgado interventor que la causa sea elevada a juico.
El acusado fue encontrado luego de estar varios años prófugo -el hecho ocurrió en noviembre del 2019- en el barrio La Victoria de Esteban Echeverría. "Ahora que lo detuvieron, lo único que espero es que quede preso y no le den arresto domiciliario", había indicado la víctima, en charla con este medio tras su detención.
Acosta debió permanecer en coma durante varios meses en el hospital Luisa C. de Gandulfo tras el hecho, hasta que fue dada de alta. Como la bala tuvo bastante recorrido en el interior de su cuerpo, le perforó cuatro veces el intestino, una en una parte del hígado, otra en el pulmón y le lastimó el páncreas.
EL HECHO
El 16 de noviembre de 2019 Teresa había ido a comprar por el barrio algo para cenar junto con una amiga. Cuando salió de la carnicería "Los Morrones", cruzó y lo vio a Alfredo. El hombre abrió una mochila donde escondía un arma y le dijo: "Vos pensaste que nunca te iba a encontrar, ahora te voy a matar'.
La mujer corrió enfrente e intentó refugiarse en la panadería "La Poro", ubicada en Claudio de Alas y Recondo. Le advirtió a las empleadas acerca de lo que le ocurría y le pidió que cierren las persianas. Cuando las estaban bajando, entró él. "Venía para pegarme el tiro en la cabeza. Me dijo que él no tenía nada para perder", recordó Teresa.
La secuencia quedó registrada por las cámaras de seguridad del comercio. Se ve el momento en el que empieza a seguirla por todo el frente del mostrador, la alcanza y le dispara a quemarropa. Mientras los empleados y clientes tratan de protegerse. La escena es puro vértigo. La víctima camina un par de metros, se toma el vientre y cae, desvanecida.