Medio Ambiente El Municipio avanza con los trabajos para mejorar la calidad de vida de los vecinos. Allí plantaron más de 300 árboles nativos.
Con diferentes obras y acciones de forestación, el Municipio avanza con la puesta en valor del Camino de Sirga del Riachuelo para mejorar la calidad de vida de los vecinos.
Mediante un trabajo conjunto con Acumar y Ceamse, se plantaron más 300 árboles nativos con el objetivo de crear un corredor multiespecie que aportará diversidad en el paisaje de la Ribera. "La plantación se da en el marco del avance de las obras para la puesta en valor del Camino de Sirga que consta de 2 mil metros de senda peatonal y bicisenda, nuevas luminarias LED, paradas de colectivo, espacios de esparcimiento, mesas, sillas y juegos deportivos", detalló el secretario de Medio Ambiente, Emiliano Baloira.
Los trabajos se desarrollan en el tramo comprendido por General Hornos y Puente La Noria, en Fiorito. El proyecto, que va a tener cuatro etapas, va a llegar hasta Camino de Cintura. "La reforma integral, que fue impulsada por Martín Insaurralde tras muchos meses de planificación y trabajo, nos va a permitir progresar con la construcción de una Lomas más sustentable y amigable con el ambiente", destacó Baloira.
La jornada de forestación también contó con la presencia de la intendenta, Marina Lesci; el subsecretario de Medio Ambiente, Martín Busnelli; la directora de Forestación y Paisajismo, Liliana Santarelli; el director general de Gestión Política y Social de Acumar, Antolín Magallanes; y el senador provincial, Adrián Santarelli.
Se llama Camino de Sirga a las franjas de 35 metros de ambas riberas del río Matanza Riachuelo que deben permanecer liberadas y ser de acceso público, según lo establece el Código Civil. Allí se vienen desplegando diferentes trabajos de pavimentación, semaforización, iluminación, colocación de sendas peatonales, señalización, equipamiento urbano, cordones, veredas, barreras y espacios verdes. Acumar monitorea de forma periódica la zona para evaluar los progresos en el saneamiento de la Cuenca.
El plan de forestación del Municipio superó los 15 mil ejemplares plantados en diferentes espacios públicos e instituciones barriales. El mes pasado hubo una jornada inédita en la Reserva Santa Catalina, donde plantaron 500 árboles con la participación de 200 vecinos, reforestadores urbanos, voluntarios y ONGs.