No se quedó callada La conductora no dejó pasar un comentario que se mofaba de su tremenda caída en Aspen, Colorado.
No son buenos días para Verónica Lozano, que aún se está recuperando tras su tremenda caída de una aerosilla en Aspen, Colorado.
Si bien la conductora se lo tomó con cierta gracia, salió furiosa al cruce de una persona en Twitter que se burló de su accidente.
"Se hace la mala, burlándose de la gente, bloquea los comentarios. ¡Karma, Vero! Todo vuelve", le escribió una usuaria de Twitter.
Ante esto, Vero Lozano no se pudo contener y decidió salir al cruce. "¡Karma la verga! Tengo más humor que toda tu familia reencarnada", escribió.
"Ahora, ¿vos me decís que yo me merezco esto por pensar distinto? Mirá qué linda manera de ver la vida. ¿Eso también sería tu karma?", agregó.
"Y claramente esta es mi cuenta/casa y hago lo que se me canta el ogt. Un poco de todo porque la vida a veces te sacude. Estoy bien, no dolor. El lunes veo al doctor y me dice cuándo me opera los talones. Gracias por las lindas energías. Las feas, espejito y rebote", cerró.
Verónica Lozano será operada el jueves próximo en los Estados Unidos de las fracturas sufridas en los pies al caer en un centro de esquí de Aspen y una semana más tarde podría retornar a la Argentina en avión sanitario.
"Me operan el jueves y, si Dios Quiere, una semana después puedo volver la Argentina en una avión sanitario, pero tienen que ver cómo evoluciono como paciente", reveló hoy, y dijo que la cirugía durará unas cuatro horas en las que deberá permanecer boca abajo para que le coloquen una placa de titanio y ocho tornillos.
El martes 8, la conductora se subió junto a su instructora de esquí y Analía Franchín a una aerosilla para seis personas, pero no pudo acomodar sus bastones correctamente y eso impidió que bajara la barra de seguridad.
Si bien tanto las tres mujeres como el resto de las personas que estaban cerca comenzaron a gritarle al responsable de las sillas que las detuvieran, no les hicieron caso.
"Fue espantoso, una secuencia de terror. Las sillas seguían avanzando y la nieve quedaba cada vez más abajo. Imagínense la desesperación, quedé agarrada de los fierros, con mitones, sin tanta movilidad. Del otro lado me agarraba Franchín y mi instructora me agarraba del casco", recordó Vero. Y reveló que en ese momento en el que quedó colgada de la silla, pensó lo peor: "Sentía que me estaba por morir".