MALABARES Y MÁS El lomense Agustín Sánchez trabajó en Europa y quiere que el rubro sea revalorizado, por lo que decidió ayudar a artistas a crear sus propios números.
Para el lomense Agustín Sánchez, el circo es, ni más ni menos, que su estilo de vida. Vive por y para este rubro, muchas veces menospreciado, pero no baja los brazos y trabaja para revalorizar la actividad. Es así que, luego de tener experiencias de trabajo en Colombia y Europa y de aprender mucho sobre malabares y números artísticos llamativos y de riesgo (su especialidad es el globo de la muerte), creó su propia productora para ayudar a aquellos que quieren dedicarse al circo. "Quiero llevar al exterior a grandes talentos nacionales y ver al prójimo en la cima", dijo, convencido de que, tarde o temprano, lo logrará.
Agustín se enamoró del circo hace seis años, cuando empezó a hacer malabares en los semáforos y a andar por la calle en monociclo. El destino también le demostró que estaba hecho para este rubro: "Me encontraba de mochilero en Colombia. Hice dedo en la ruta y me levantó una persona que era dueño de un circo de carpa y me ofreció trabajar con ellos".
Sánchez fundó Jumps Arts, una productora que busca ayudar a aquellos artistas que necesitan perfeccionar un número o quienes están en la búsqueda de un espacio para desarrollar sus habilidades.
Tras varios meses de trabajo, se fue a demostrar sus habilidades a un circo mucho más grande y profesional, donde conoció a su verdadero amor: el globo de la muerte. "Nunca había manejado una moto, pero esa esfera me hipnotizó. Es una disciplina de riesgo, me golpeé varias veces, pero me encanta hacerlo", rememoró el lomense de 26 años, que inmediatamente explicó que su paso por aquel circo fue muy duro, ya que "nos daban de comer arroz y huevo, no venía nadie a las funciones".
"Cuando estuve en el globo de la muerte por primera vez, hace cuatro años, algo se encendió adentro mío. Ahí supe que tenía que crear mi propia productora para circenses o artistas", reveló Agustín sobre lo que fue una corazonada que decidió hacer realidad.
Queremos que los circenses argentinos puedan cumplir sus sueños, que sus aspiraciones no tengan límites. Somos conscientes de que es muy difícil vivir exclusivamente del arte, por eso queremos aportar nuestro granito de arena para profesionalizar el rubro.
Pero antes de eso, Sánchez pudo cumplir uno de sus objetivos: también como mochilero, estuvo en Europa y trabajó en distintos circos de Inglaterra, Irlanda y Francia, donde pudo disfrutar
Ya de vuelta en Argentina, Sánchez fundó Jumps Arts, una productora que busca ayudar a aquellos artistas que necesitan perfeccionar un número o quienes están en la búsqueda de un espacio para desarrollar sus habilidades. "Queremos que los circenses argentinos puedan cumplir sus sueños, que sus aspiraciones no tengan límites. Somos conscientes de que es muy difícil vivir exclusivamente del arte, por eso queremos aportar nuestro granito de arena para profesionalizar el rubro", enfatizó Agustín, que explicó que actualmente son siete personas trabajando en el proyecto, que incluso cuenta con community manager, fotógrafa y un encargado de la logística.
"A mí me gusta mucho viajar, por eso otra parte importante del proyecto es llevar a Europa a los grandes talentos locales y a los mejores números, para que puedan hacerse visibles en circos, festivales y eventos internacionales", agregó, emocionado con sus palabras, ya que la ambición de Agustín es "ver al prójimo en la cima".
Otra parte importante del proyecto es llevar a Europa a los grandes talentos locales y a los mejores números, para que puedan hacerse visibles en circos, festivales y eventos internacionales.
"Como ciudadanos estamos muy acostumbrados a que este tipo de arte es callejero y que está bien que sea a la gorra o directamente no se le pague. Quiero cambiar ese pensamiento", acotó.
Jumps Arts hizo hace unos días una presentación en La Troupe (Banfield) con números aéreos, malabares, contorsionismo, malambo femenino, payasos y, por supuesto, el globo de la muerte. "El evento superó nuestras expectativas, todos quedaron conformes y ya piden otra fecha. Seguramente sea a finales de octubre o principios de noviembre", adelantó el lomense.