incentivo Los jóvenes privados de su libertad en dicha institución incorporaron las clases de fútbol a sus actividades semanales.
Con el objetivo de trabajar sobre la inclusión en distintos ámbitos y a través del deporte, Lomas lanzó hace un tiempo el Programa "Salimos Jugando" que recorre instituciones de todo el Distrito llevando clínicas deportivas o recreativas.
En esta oportunidad se desarrolló un encuentro en el CREU, el Centro de Recepción, Educación y Ubicación (CREU), donde permanecen privados de su libertad menores de edad en conflicto con la Ley penal juvenil. Allí sumaron clases de fútbol en un formato similar al que se utiliza con reclusos de la Unidad N°40 de Lomas.
"Los objetivos son mejorar y potenciar sus capacidades físicas, que ocupen su tiempo de manera productiva, incluir a las personas que no conocen la disciplinas, y enseñar técnicas y rutinas de entrenamiento funcional", explicaron desde el área de Inclusión Deportiva que lleva adelante el proyecto.
Como parte de "Salimos Jugando", también se trabaja con hogares y comunidades terapéuticas de distintos barrios de Lomas donde los profesores concurren una vez por semana para brindar clases deportivas a niñas, niños y adolescentes, o utilizan clubes de barrio o espacios abiertos para los encuentros. "En el caso del CREU se hizo fútbol en su predio, pero, por ejemplo, en la Comunidad Terapéutico El Palomar tienen atletismo o en Pueblo de la Paz vamos con varios deportes. En este sentido, el programa es amplio y comprende a muchas instituciones", explicó Rocío Caballero, subsecretaria del área de Inclusión.
Los hogares Pereyra, Las Torcacitas, También son Nuestros, Guadalupe, Teresita y Casa de Abrigo, entre otros, también forman parte de esta iniciativa. "Creemos que 'inclusión' es habilitar mundos y formas de vida justas con todas las personas que, por cualquier razón, no las conozcan o no hayan podido acceder, registrar, conocer, vivenciar. Elegir qué ser, conocer y reconocer deseos, derechos, oportunidades", agregó Caballero.