Nieto 118 Martín Ogando Montesano, que nació en el Pozo de Banfield y recuperó su identidad en 2015, declaró en el juicio por crímenes de Lesa Humanidad.
Martín Ogando Montesano nació en el Pozo de Banfield, donde sus padres fueron torturados y desaparecidos. Después de muchos años logró recuperar su identidad y este martes tuvo la oportunidad de contar su historia en el juicio por los crímenes de Lesa Humanidad cometidos en el centro clandestino.
"No siempre fui Martín Ogando Montesano. Mis padres de crianza no podían tener hijos y me adoptaron de forma ilegal luego de que les dieron el dato de una clínica en Wilde a la que fueron el 19 de enero de 1976, llevaron dinero y me compraron. Crecí con ellos, siempre supe que no era su hijo biológico, y luego me enteré cómo fue", relató Martín ante el Tribunal Oral Federal N°1 de La Plata.
Stella Maris Montesano y Jorge Ogando, militantes en el PRT-ERP, fueron secuestrados el 16 de octubre de 1976 en La Plata. Ambos estuvieron detenidos en el Pozo de Banfield, donde funcionaba una maternidad clandestina en la que Stella dio a luz a Martín. "La llevaron esposada a dar a luz en la cocina con los ojos vendados, arriba de una chapa y sin ninguna higiene. Los dos fueron torturados y desaparecidos en el Pozo de Banfield, y luego mi abuela recibió una carta de un militar de Campo de Mayo que le decía los números de DNI de ellos y le aseguraba que habían sido enterrados en una estancia a las afueras de La Plata, pero hasta hoy los forenses no han podido encontrar sus restos", señaló.
Mediante una larga e incansable búsqueda, su abuela Delia Giovanola (una de las 12 fundadoras de Abuelas de Plaza de Mayo) recorrió diversos puntos del país y del exterior con la esperanza de encontrar a su nieto y a cientos de jóvenes apropiados por la dictadura cívico-militar. Otra persona clave en la búsqueda fue Virginia Ogando, hermana de Martín que falleció en 2011.
"Mi abuela Delia se hizo cargo de Virginia y la crió. Tristemente, mi hermana se quitó la vida tras una depresión muy grande. Empezó a buscar, a querer conocer del cautiverio de mis padres, saber sobre las torturas, esto le hizo muy mal. Todos me hablan de ella como si fuera un ángel y que lo que más quería era encontrarme", expresó Martín.
En marzo de 2015 se acercó espontáneamente a Abuelas con sospechas de ser hijo de desaparecidos y, ocho meses después de la extracción de sangre y varios trámites, el Banco Nacional de Datos Genéticos le informó que sus padres eran Stella Maris y Jorge. La restitución del nieto 118 fue anunciada el 5 de noviembre de 2015.
Fue un antes y un después de 2015 con mucho dolor, muerte, padres torturados, desaparecidos, y una hermana que a consecuencia de esto no pudo seguir viviendo más.
"Como vivo en Estados Unidos desde el año 2000, hago la prueba en el consulado argentino en Miami. Cuando cuento mi historia no pareciera que soy el protagonista. Fue un antes y un después de 2015 con mucho dolor, muerte, padres torturados, desaparecidos, y una hermana que a consecuencia de esto no pudo seguir viviendo más", destacó Martín, y agregó: "Pese a todo esto, conocer la verdad reconforta".
Ogando Montesano contó que la partera Juana Franicevich firmó su partida de nacimiento y la de Ana Libertad Baratti De La Cuadra, otra nieta restituida. Franicevich tenía vínculo con el médico policial Jorge Bergés y se dedicaba al tráfico de bebés.
En el cierre de su declaración, Martín se dirigió a los jueces y remarcó: "Estos genocidas, en mi caso y en todos, arruinaron a cuatro generaciones. Aprovecho a pedir cárcel común y efectiva, nada de domiciliarias".
El TOF Nº1 de La Plata juzga a 18 represores que actuaron en el Pozo de Banfield, Pozo de Quilmes y la Brigada de Lanús. Entre las 442 víctimas hay 18 mujeres embarazadas que dieron a luz en cautiverio. En la audiencia de este martes también brindó testimonio Emilce Moler, sobreviviente de La Noche de los Lápices que estuvo detenida en el Pozo de Quilmes.