Tocado El volante presenta un esguince en el tobillo derecho. Ya de descartó una lesión ósea y de ligamentos. Los médicos harán lo imposible para que diga presente.
En la previa a un clásico, los jugadores suelen cuidarse, sobre todo los que están al límite de amonestaciones, pero las lesiones suelen aparecer en el momento menos pensado. El domingo por la noche, Martín Payero preocupó al Mundo Banfield cuando debió a abandonar la cancha a los tres minutos del complemento.
Ya en el primer tiempo frente a San Lorenzo adujo una molestia. Intentó seguir, pero en esa jugada contra Jalil Elías quedó tendido en el césped y se retiró entre lágrimas en camilla. Una bolsa de hielo sobre su tobillo derecho apaciguó un poco el dolor.
Los estudios realizados al volante cordobés llevaron alivio. Los mismos no arrojaron lesión ósea ni de ligamentos y solamente se habla de un fuerte esguince. Desde el cuerpo médico -principalmente- y técnico confían en que en llegue buenas condiciones al partido del próximo sábado a las 16.15 contra Lanús en el estadio Florencio Sola.
El tobillo de Payero viene averiado desde hace un tiempo, por lo que la semana de entrenamientos la arrancó con rehabilitación, kinesiología y otras terapias. El objetivo es no exigirlo con trabajos de campo y recién habrá un diagnóstico cierto a fin de semana.
El oriundo de Pascanas es la referencia futbolística de Banfield. Jugó cuatro de los cinco partidos de la Copa de la Liga Profesional. Completó los 90 minutos contra Racing, 74m. contra arsenal (reemplazado por Jonás Gutiérrez), 52m. ante Colón hasta el momento de su expulsión y 48m. con San Lorenzo (lo sustituyó Jesús Dátolo al momento de la lesión). Ausente versus Central Córdoba de Santiago del Estero, jugó Dátolo, que a su vez entró en su lugar a los 79m. en el triunfo ante Güemes de Santiago del Estero por Copa Argentina.
Mientras tanto, el plantel lleva su segundo día de entrenamientos en el Campo de Deportes de Luis Guillón. Además de la evolución de Payero, el entrenador Javier Sanguinetti determinará su mete mano en el equipo con algún cambio de mitad de cancha hacia adelante.