AGRADECIMIENTO Las pacientes del obstetra fallecido el viernes por Covid quieren homenajearlo y lanzaron esta propuesta.
La noticia de la muerte del reconocido obstetra lomense Carlos Fayanás golpeó fuerte. Sus restos fueron despedidos el sábado en la puerta de la casa velatoria Pepe Medina, con un aplauso eterno de sus pacientes sobre la avenida Hipólito Yrigoyen, en Remedios de Escalada.
Pero este sentimiento de tristeza de estas mujeres se transformó con el paso de las horas en ideas para homenajearlo. Enseguida en el grupo Homenaje al Dr. Carlos Fayanás, que hoy cuenta con 2 mil seguidores (el triple de personas antes de que él quede internado) empezaron a surgir propuestas.
Una de ellas es la colocación de dos placas, una en el Santario Juncal y otra en su consultorio Darragueira 501, Banfield, donde atendió hasta último momento. Otra de las propuestas es más ambiciosa: que la calle Darragueira 501 se pase a llamar Carlos Fayanás.
La petición ya circula en change.org y está por llegar a las 1.000 firmas. Pamela Gariglio fue quien tuvo la idea: "Esta petición es una pequeña muestra de afecto para honrar la memoria de una persona excepcional, que aún siendo una persona de riesgo no abandono su trabajo ni a sus pacientes".
Y agregó: "Hoy el grupo esta más unido que nunca por el dolor que nos causo su perdida. Asi mismo hemos acordado que calle lleve su nombre es una forma de honrarlo y perpetuar su paso por esta vida y el legado que nos dejó".
Para fimar la petición dirigida al Municipio de Lomas, hacé click acá.
UN POCO DE ÉL
Carlos Fayanás tenía 73 años. Trabajó hasta el último día que pudo, cuando quedó aislado e internado en el Sanatorio Juncal, el 17 de septiembre. A pesar de pertenecer al grupo de riesgo, porque era diabético, paciente cardíaco y había sufrido cáncer, no dejó de atender a sus pacientes.
La pasión y el amor por su profesión generó un vínculo muy fuerte con ellas a lo largo de su carrera.
En un mensaje de 2019, lo dejó muy en claro en el grupo de Facebook (creado en 2012 para homenajearlo): "Estoy profundamente emocionado y agradecido a todas aquellas pacientes que me demuestran su cariño. Saben cual es el secreto de ser como soy , es muy simple : amo lo que hago , tome con mucha vocación y responsabilidad la profesión, y aunque ustedes no lo crean, cada nacimiento lo siento como si fuera el primero, me pone muy feliz compartir con los padres el advenimiento de una personita que llena de amor nuestros corazones. Es más, en la próxima vida , si me dejan, haría lo mismo y las eligiría a todas ustedes como pacientes nuevamente. Gracias, Gracias, Gracias".