SITUACIÓN SIMILAR PARA LOS BARBIJOS
Las farmacias de Lomas, que son una de las actividades esenciales y que no pararon de trabajar desde la llegada del Coronavirus a Argentina y desde el comienzo de la primera cuarentena estricta, coincidieron en indicar que la venta de alcohol en gel se ha normalizado, luego de que tanto en marzo como en abril se haya dado un enorme aumento de la demanda, la cual osciló entre el 200% y 400%. Con los barbijos sucedió algo similar. son obligatorios para salir a la calle, pero la aparición del tapaboca casero hizo que la demanda también disminuyera.
“La mayor cantidad de venta de alcohol en gel se dio al principio de la pandemia, entre marzo y abril. La demanda había aumentado entre un 300% y 400 %”, explicó Hilda Ojeda, encargada de Farma 24, ubicada en Yrigoyen 8101.
Lilian Sparhs, de la Farmacia Cancino (Rivera 600), dijo: “Aumentó mucho los primeros meses, alrededor de un 200%, pero ahora se tranquilizó porque se vende en muchísimos comercios, incluso en verdulerías”. Dicho crecimiento hizo que muchas farmacias se vieran en el problema de no conseguir stock para poner a la venta un producto tan esencial para el cuidado de la salud de los vecinos.
“Ya no hay una gran demanda de alcohol en gel. Al principio fue caótico, la situación nos desbordó a todos”, señaló Pablo Jauregui, quien trabaja hace más de 50 años en la Farmacia Del Águila, ubicada en Laprida 701 desde 1911. Inmediatamente indicó que ya hay abastecimiento y, sorprendentemente, coincidió con su colega al explicar que ha visto la venta de alcohol en gel en verdulerías.
Hilda luego aseguró que, si bien ahora se normalizaron tanto las ventas como el stock, la comercialización del producto sigue su curso. “Ahora hay oferta ya que no existe tanta demanda”, señaló y coincidió Sparhs.
“Los precios del alcohol en gel varían según la marca y la calidad. Entre $180 y $250 se puede conseguir un cuarto de kilo, de uno que sea elaborado en laboratorio y aprobado científicamente”, señaló Pablo sobre los precios que se manejan actualmente en el mercado.
Con los barbijos sucedió algo similar, ya que con el correr de los días y la cuarentena se convirtió en un elemento indispensable para salir a la calle, por lo que la comercialización aumentó considerablemente. “Los números de la venta de los barbijos también crecieron enormemente al principio de la pandemia”, dijo Ojeda, mientras que Lilian explicó: “Una vez que se popularizó el tapabocas casero, de a poco el barbijo ha sido reemplazado”.
“La gente también lleva alcohol etílico para diluirlo con agua y utilizarlo como una especie de pulverizador, tanto para las superficies como para higienizar los productos del supermercado o la ropa”, concluyó Jaure