región Una pareja de Claypole emprendió la aventura a bordo de ese vehículo junto a su mascota. Esperan recorrer el continente con lo básico y necesario para vivir y llegar hasta Alaska. "Estamos atravesando el desapego y deseamos olvidarnos de lo que impone la sociedad", confiaron.
Después de unos meses de analizar si se embarcaban en una gran aventura, la pareja de Claypole conformada por Pamela (23) y Nahuel (24) decidió recorrer el continente en Combi. Hoy están en Córdoba, pero el objetivo es llegar a Alaska.
"El viaje comenzó el 26 de diciembre, ya hace más de un mes. Lo que nos motivó a hacer esto fueron las ganas de aprender de las personas que vayamos conociendo en el camino y queremos dejar de depender del dinero que nos impone la sociedad", señaló Pame desde Mina Clavero, la parada en la que se encuentran actualmente.
Ambos soñaban desde chicos en emprender un viaje de este estilo, pero nunca pensaron hacerlo en la combi que le compraron a un vecino. "Estaba arruinada, pero con la ayuda de amigos y familiares la pusimos a punto para poder hacer este viaje", recuerdan.
Además de recorrer diferentes lugares y conocer a diferentes personas, el objetivo de esta pareja es aprender de la experiencia. "Desde un principio decidimos subsistir con lo justo y necesario. Para mi fue difícil el desapego porque tuve que deshacerme de muchas de mis pertenencias porque debemos viajar livianos", confiesa Pame.
La idea es seguir recorriendo el continente y trabajar para poder subsistir. "En cada pueblo vendemos aros pintados a mano, llaveros, imanes y porta sahumerios con dibujos que nosotros mismos realizamos", contaron.
"Queremos conocer primero nuestro país a fondo y después ir subiendo hasta Alaska; ése el objetivo. No sabemos si lo vamos a lograr, pero tenemos muchas esperanzas", auguró Pame.
El dinero sólo lo utilizan para llenar el tanque y comer los tres porque viajan junto a su perrita Peque que es la fiel compañera de esta pareja aventurera.
"Soñamos con viajar siempre y lo más complicado es estar lejos de la familia, pero como podemos hacer videollamadas, eso nos ayuda a estar en contacto permanente con ellos", manifestaron.
"Aprendemos cada instante a valorar lo poco que tenemos y creo que eso nos va a cambiar para siempre nuestra forma de vida", concluyó Pamela orgullosa de la experiencia.
