Vendrán con fuertes subas las boletas de luz y gas en invierno

Es que por primera vez se aplicarán de forma plena las nuevas tarifas autorizadas por el Gobierno. Los aumentos alcanzan hasta el 325%.

El impacto de las tarifas de luz y gas se hará sentir con fuerza en miles de hogares de la Ciudad y provincia de Buenos Aires durante el invierno: con la aplicación plena de los nuevos importes que aplicó el Gobierno, las facturas de Edesur y Edenor podrían llegar con subas del 67% al 234% y las de Metrogas con aumentos del 178% al 325%.

Los datos surgen de un estudio realizado el Centro de Estudios y Servicios Públicos y Privados (Cespup) que analizó los nuevos cuadros tarifarios que comenzaron a regir a partir del 1° de marzo pasado, ahora sin amparos, resoluciones y fallos judiciales de por medio. Según se desprende del informe, sólo el ahorro en los niveles de consumo permitirá aminorar los incrementos, a partir del reajuste de los costos fijos de abastecimiento que deben ser abonados independientemente de la demanda que tenga cada usuario.

Por ejemplo, en el caso del servicio eléctrico, a partir de las resoluciones Nº83 y Nº63 del Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) se estableció que el cargo fijo será valorizado en forma mensual y no bimestral, lo que podría derivar en incrementos de hasta el 1.138% en este ítem; y además se modificaron los bloques de consumo por usuario lo que produce “cambios tarifarios implícitos manteniendo el mismo consumo del año anterior.

Así, un usuario que antes consumía hasta 300 kilowatts/hora por mes y abonaba una tarifa T1 R1, ahora se convertirá en un usuario que abonará una Tarifa T1 R2, es decir, que abonará un precio mayor por kilowatts/hora por tener un salto de categoría consumiendo los mismo.

En el caso del gas, el incremento a partir del 1° de abril es del 30%, pero ese porcentaje sumado al ya aplicado en 2016, hace que la variación promedio del servicio para la mayoría de los hogares sea del 300%. A esto hay que sumarle las subas en los cargos fijos, que alcanzan el 287%.

Estos costos corrientes son para solventar costos de comercialización de las distribuidoras, que recibieron un fuerte guiño del Gobierno pese a no invertir como debían en la última déc