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Toma de rehenes durante casi tres horas en Quilmes

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Un delincuente estuvo hoy cerca de tres horas atrincherado con un rehén en una juguetería del centro comercial de Quilmes. 

Todo comenzó cuando el ladrón ingresó tras ser perseguido por la Policía luego de escapar de otro negocio en el que quiso robar a una comerciante, que se resistió y le mordió un dedo. El delincuente, identificado como Claudio Damián Mariani (22), oriundo de Quilmes, tenía una probation por un robo cometido con anterioridad.

Los testigos aseguraron que Mariani estaba fuera de sí por el consumo de alguna sustancia cuando ingresó al local de ropa situado en la calle Moreno y la peatonal Rivadavia.

El hombre primero empezó a mirar ropa que quiso probarse, momento en que la comerciante le pidió saber si tenía dinero y él se puso agresivo e intentó robarle. Ante esa circunstancia, y con el fin de resistirse al robo, la mujer mordió al delincuente en un dedo, por lo que éste escapó corriendo del local y comenzó a correr por la peatonal Rivadavia, donde fue visto por policías que comenzaron a perseguirlo.

"Cuando empieza la persecución y se siente acorralado ingresa en una juguetería donde toma a un rehén", dijo el fiscal del caso, quien aclaró que la víctima era un cliente, ya que en ese momento los empleados del local estaban sentados en un banco que hay en la vereda.

Una vez en el interior del negocio con el rehén, el delincuente extrajo un arma que apoyó en el cuello y por momentos en el abdomen del rehén, al tiempo que exigía a la Policía la presencia de un fiscal y la entrega de comida y bebidas.

A los pocos minutos se rodeó el lugar por la Policía y arribó el Grupo Halcón con un mediador que tomó contacto con el delincuente para hacerlo desistir de su actitud.

Tanto el funcionario judicial como el jefe policial del caso coincidieron con que inicialmente el ladrón estaba "muy nervioso" y parecía estar "bajo los afectos de alguna sustancia", lo que se determinará en las próximas horas con los estudios médicos de rigor.

Finalmente, el negociador accedió a alguno de los pedidos, como la entrega ante el fiscal con algunas garantías y se le proporcionó comida y bebida, adquiridas en un local de comidas rápidas situado a pocos metros.

Cerca de las 12.30, el delincuente luego de mencionar que quería contactarse con  sus familiares, el delincuente se entregó, dejó su arma y fue trasladado a la comisaría primera de Quilmes, desde donde luego será llevado a declarar a la fiscalía de ese distrito.

En principio, el fiscal dijo que se le imputan tres delitos: tentativa de robo con arma, por el primer hecho; privación ilegítima de la libertad, por la toma del rehén, y tenencia ilegal de arma de uso civil.

 

 

 

 

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