Los secretos de Edgar

POR Edgardo Solano

Un nutrido grupo de científicos avezados en la conservación de obras de arte del Museo Fitzwilliam en Cambridge echaron mano a la tecnología de los rayos X para analizar de qué materiales están hechas tres esculturas del artista francés Edgar Degas. Objetos comunes y silvestres, como corchos de botellas de vino o tablas viejas forman parte de la estructura de tres estatuillas de bailarines del siglo XIX, que se expondrán próximamente en ese museo británico. El trío de esculturas estudiadas, bailarín arqueado, bailarín con pandereta y Arabesque sobre la pierna derecha y brazo izquierdo de frente, están esculpidas en cera y fueron fundidas en bronce después de la muerte del artista. Un vocero del Museo Fitzwilliam dijo que el uso de este tipo de objetos confirman que Degas era “un escultor muy poco ortodoxo que usó prácticas no convencionales de trabajo”. Además, señaló que tanto la incorporación de estos materiales como el empleo de nuevas técnicas para esculpir sus estatuillas fueron la primera señal de cómo el artista francés fue utilizando en menor medida la cera de abejas para sus creaciones. La mayoría de sus obras fueron fundidas en bronce después de su muerte, pero aún se conservan algunas de sus creaciones en la cera original. El estudio también sacó a la luz que Degas, además, dobló alambre para poder moldear la postura deseada en las estatuillas y, según parece, después fue agregando materiales que iba encontrando desperdigados dentro de su estudio. La responsable de las artes aplicadas del Museo Fitzwilliam, una tal Victoria Avery, afirmó que “Degas desafió la tradición y la práctica contemporánea para resistirse a tener su escultura fundida en bronce”. Edgar Degas, que murió el 27 de septiembre de 1917 a los 83 años, hace un siglo, se hizo popular por sus pinturas en óleo y por estar asociado particularmente a la temática de la danza. El artista francés se considera como uno de los fundadores del Impresionismo, aunque él solía despegarse de ese rótulo, mientras que prefería definir lo suyo como Realismo o Arte Realista. Nacido en París el 19 de julio de 1834, en una familia acomodada que le insistía con que se convirtiera en abogado, Degas fue uno de los grandes dibujantes de la historia por su magistral captación de las sensaciones de vida y movimiento, especialmente en sus obras de bailarinas, carreras de caballos y desnudos. Además, sus retratos son muy apreciados por la complejidad psicológica y sensación de verdad que transmiten. También se dice por ahí que Hilaire-Germain-Edgar de Gas, su verdadero nombre, era un hombre tímido, sensible, algo retraído, con una gran vida interior que a veces le dificultaba la relación con sus semejantes. Pero esos secretos sobre su personalidad siguen sin resolverse, a pesar de los rayos X.