La doctora de Lomas que atiende gratis a los vecinos sin obra social

Agueda Schnoller es médica clínica internista desde hace más de 50 años y dedica un día a la semana para sanar a quienes no tienen cobertura de salud porque asegura que en su profesión lo más importante “es mantener la vocación de servicio”. 

Agueda Schnoller es de Lomas y hace 53 años que se recibió de médica en la Universidad de Buenos Aires (UBA), desde ese entonces ha dedicado su vida a sanar y a comprometerse con cada uno de sus pacientes. Tal es así que hace más de dos décadas decidió brindar junto al grupo religioso Misioneros de la Solidaridad atención gratuita a las personas sin obra social en el Centro Nazareth de Asistencia a la Comunidad que pertenece a la Basílica Sagrada Familia de Nazareth de Banfield porque está convencida de que lo más importante es “mantener la vocación de servicio”. “Recibimos más de lo que damos”, asegura Schnoller, quien hace exactamente 22 años inauguraba junto a sis compañeros dicho espacio con consultorios, ubicado en Pueyrredón 1571, Banfield. Allí todos los martes, de 17 a 20, brinda atención médica totalmente gratuita.  “Hay mucha fe en mi entorno, soy profundamente creyente y el enfermo para mí es Cristo, por eso el amor al prójimo es algo fundamental en la personalidad de todo ser. En esta labor social no soy yo sola, es un grupo que cada martes entrega su tiempo a quienes lo necesitan”, explicó la médica que trabajó en el Hospital de Clínicas de la Ciudad por más de 30 años.  Schnoller siempre se dedicó a trabajar en el ámbito de la salud pública. “Como dice el Papa Francisco el verdadero poder es el servicio”, recordó.  Con una hija psicopedagoga y un hijo médico, la doctora local parece haber llevado a su familia a transitar su mismo camino de servicio al prójimo.  “Lo más importante es la comprensión humana, tanto la parte física como la espiritual. Lo que más me gusta de mi profesión es el encuentro con la gente, porque se trata de poder solucionar algo que le pasa al otro”, destacó la doctora que se recibió de bachiller en la Escuela Normal de Lomas.   Sobre la atención del paciente, ella asegura que los médicos deben tomarse su tiempo. “En el consultorio hay que mirar a los ojos, demostrar interés en el paciente por saber qué es lo que le pasa y cómo solucionarlo”, agregó.  La dedicación y su incansable labor social la llevaron a convertirse en la médica del barrio a la que recurren muchísimas personas que ya confían en ella gracias a su atención de cada martes.  “Hay mucha falta de comprensión, muchas necesidades, la marginalidad existe y debemos trabajar para poder terminar con ella desde nuestro lugar. Nosotros, como grupo, hacemos este trabajo solidario en conjunto porque siempre se puede hacer algo por el prójimo”, destacó. EL CENTRO NAZARETH. El espacio que pertenece a la Basílica Sagrada Familia de Nazareth de Banfield fue creado por el grupo religioso Misioneros Solidarios que integra la doctora Schnoller junto a sus compañeros de trabajo. Remedios, alimentos no perecederos, leche en polvo, pañales y todo lo necesario ante cualquier necesidad es lo que brinda este espacio que abre sus puertas cada martes. “Hay que destacar que el lugar subsiste gracias a las donaciones de los vecinos solidarios, que siempre están presentes, y al compromiso de quienes estamos allí cada martes”, advirtió Schnoller. Actualmente sólo atiende la doctora Schnoller, pero se necesita el compromiso solidario de psicólogos, pediatras y un médico clínico más para incluir en los consultorios.  “Lo único que se pide al profesional que quiera adherirse al Centro Nazareth es que tenga vocación de servicio, porque es fundamental para llevar adelante esta labor que requiere tiempo y mucho compromiso”, resaltó la profesional.  Sobre los requerimientos actuales del espacio de salud que fue estrictamente creado para realizar esta labor solidaria, pidieron a quienes puedan ayudar que se acerquen al lugar con “remedios, pañales, alimentos no perecederos y leche en polvo”, que es lo que más les hace falta.  Cada paciente que se acerca al Centro Nazareth de Asistencia a la Comunidad se va con algo que requiera y que sea de suma urgencia. Por eso, cada donación es importante para quienes están al frente de este espacio de salud gratuito. “Lo que hago como médica es brindar la medicación directamente en el consultorio, si es que la tenemos al alcance, y también se realizan las derivaciones correspondientes al Hospital Melo de Lanús. Si son internaciones se recomienda recurrir al Gandulfo o al Evita”, contó Schnoller.   AMIGA Y COMPAÑERA DE TRABAJO. Margarita Sassi es amiga personal de la doctora y secretaria del Centro Nazareth. Juntas llevan adelante este trabajo solidario “intenso pero sumamente gratificante”, como ellas mismas aseguran.  Sobre su amiga y compañera Margarita dijo: “Agueda es una persona con los pies en el suelo y los ojos en el cielo. Para ella la fe, la esperanza, la sanidad, la misericordia, la caridad y el perdón son eslabones de una cadena que se entreteje con el amor. Ese amor al otro muchas veces la hace olvidarse de ella misma. Jesús dijo: ‘Ama a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a ti mismo’. Ella lo cumple en todo momento. Es una mujer que cura y no se cansa. Alguien que sabe amar como Jesús enseñó. Con eso está todo dicho”.