El presupuesto bonaerense fue aprobado por Diputados

Prevé gastos por más de $600 mil millones, recortes, endeudamiento y un pacto fiscal con los municipios que limita el accionar de intendentes.

Tras varias horas de especulaciones con alianzas, apoyos de intendentes peronistas e intentos de aplazar la discusión, el presupuesto de la Provincia de Buenos Aires para 2018 fue aprobado en la Cámara baja y fue enviado al Senado en busca de que se convierta en ley. En Diputados, fue acompañada desde la oposición por el Frente Renovador, el GEN y un sector del peronismo. El proyecto de Presupuesto provincial para el año que viene prevé gastos por más de $600 mil millones, con un déficit de $30 mil millones y pedidos de endeudamiento por casi $60 mil millones. Además, prevé un recorte de gastos en la Legislatura del orden de los $2.500 millones y el incremento en el impuesto inmobiliario urbano que, en determinados casos, llegará con aumentos de hasta 75%, entre otros ajustes. La norma incluye también un pacto fiscal con los municipios a través del cual impone una serie de requisitos para acceder al sistema crediticio de la Provincia. Entre ellos se encuentra la necesidad de que no aumenten el gasto más que la inflación, ni el empleo más que el crecimiento vegetativo de la población. Además se impondrá la “regla de final de mandapidos de personal jerárquico sólo por motivación política, “ahora han iniciado una nueva etapa de despidos a cuenta gotas. Ya van 10 en los últimos días sin ningún tipo de causa”. El temor mayor viene de la millones de personas- el bono para descomprimir la presión social. El mismo todavía no fue confirmado ni negado, como tampoco la posibilidad de que haya un plus para las organizaciones sociales de la denominada “economía popular”, como son la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), Barrios de Pie y la Corriente Clasista y Combativa (CCC)), que recibirían por única vez $2.200. ■ El exministro de Hacienda y Finanzas del actual gobierno, Alfonso Prat Gay, evaluó que el déficit de cuenta corriente “es el más alto en diez años”, ya to”, por la cual los intendentes no podrán contraer gastos en los últimos seis meses de su gestión que comprometan a su sucesor, como también quienes no adhieran no se podrán endeudar ni recibirán ayuda provincial. “Es un avasallamiento a la autonomía de los municipios”, opinó el diputado del FpV Walter Abarca.